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¿QUIÉN MATÓ A ASLAN?

Los jóvenes guerreros se acercan sigilosos a la tienda del Rey. Un aire reverente satura la atmósfera. Cientos de criaturas mitológicas observan la gran carpa aguardando su aparición. “¿Quién será Aslán?”, preguntan los muchachos con ojos curiosos y expectantes. “¿Cómo será el soberano de Narnia?” “¿Esperamos un Príncipe con corona de oro?”, “¿Esperamos un viejo guerrero?, “¿Esperamos un gobernante sabio?” “¿Esperamos acaso un caudillo joven y conquistador?.

La espera alimenta el misterio. Los jóvenes siguen aproximándose, convencidos de que en apenas instantes el enigma será develado.
El ruido de las cortinas anticipa el esperado momento. Aslán hará su aparición. Suena el cuerno de carnero. Las criaturas se postran. Las cortinas de la tienda se abren. Los muchachos observan. Entonces aparece Él…
Dos grandes garras asoman entre las sombras. Un pelaje salvaje y limpio. Mirada fiera, dulce también. Penetrante, profunda. La melena baña de majestuosidad su cuerpo. Su andar es seguro, calmo. Irradia fuerza. Todo en Él es potente, lleno de vida. Su voz demanda respeto. Es un suave rugido. Cada uno de sus movimientos evoca hermosura. Mezcla de templanza y pasión. ¿Quién es Él? Es Aslán, el León Rey, soberano de Narnia.
Como te habrás dado cuenta, la escena forma parte de “Las crónicas de Narnia”. Quizás hayas visto esta película, si no lo hiciste te la recomiendo. Aslán es el protagonista de la historia, así como Dios de la nuestra. Él es el Rey Majestuoso. Soberano de nuestro mundo. La Biblia lo llama “El León” y dice que nos hizo “a su imagen”. Eso significa que todos los seres humanos llevamos ira adentro. Somos leones que necesitan rugir. La religión se ha encargado de decirnos que la ira es algo malo, pero lo cierto es que forma parte de la naturaleza divina. Dios es una persona de ira y nos desafía a ser iguales a Él.
¿Qué hacemos los seres humanos con nuestra ira? Un gran porcentaje decidimos enojarnos con Dios. Somos como Jony, un toro indómito y rebelde. Sus frases favoritas son: “A mi Dios nunca me bendice”, “Para qué obedecer a Dios si al fin y al cabo me termina saliendo todo mal”, “Dios a mi ya me cortó el chorro” “No te das cuenta que todo eso de que Dios es bueno es una gran mentira”, “Ves lo que me pasa, mejor me olvido de Dios que me va mejor” y frases por el estilo. Jony vive con una profunda amargura interior que trata de disfrazar a través de su imagen autosuficinte, fuerte, de tipo que todo lo puede, que no necesita del consejo de nadie, y mucho menos el de Dios. Cuando Jony se equivoca o algo no sale como él esperaba, enseguida le echa la culpa a su mala suerte, al destino o a la vida, y termina comprobando que su hipótesis es verdadera: Dios no me ama. La ira orientada hacia Dios siempre es igual a rebeldía. Y mientras aflora ese toro rebelde y demandante desde arriba se escucha una pregunta:“¿Quién mató a Aslán?”
Otro porcentaje de seres humanos decidimos enojarnos con los demás. Somos como Susy, una serpiente resentida. Algunas de sus frases favoritas son: “Sin tan solo hubiera nacido en otra familia” “Si tan solo mi familia cambiara” “Con este jefe que tengo nunca podré crecer” “En este país de porquería nadie te da una mano, nunca una oportunidad, nunca una alegría ” “Claro, a estos les va bien porque algo raro habrán hecho” “La culpa de todo la tiene el gobierno” y cosas por el estilo. Susy resentimiento vive con una profunda amargura interior que manifiesta a través de la crítica, la murmuración, la envidia y la rivalidad. Como no ha podido resolver su frustración, vive tratando de “bajar” a los demás para sentirse un poquito más importante. Cuando Susy se equivoca o algo no sale como ella esperaba, enseguida patea la pelota afuera y le echa la culpa a su familia, a sus vecinos, al país, a su jefe o a alguno de sus amigos y amigas. Y termina comprobando que su hipótesis es verdadera: todos están equivocados menos yo. La ira orientada hacia los demás siempre es igual a resentimiento. Y mientras aflora esa serpiente rencorosa y evasiva desde arriba se vuelve a escuchar la pregunta: “¿Quién mató a Aslán?”
Un tercer grupo de seres humanos hemos decidimos enojarnos con nosotros mismos. Somos como Tomy, un ratoncito depresivo. Entre sus frases favoritas están las siguientes: “Nací para perdedor y no hay mucho que hacer al respecto”, “Acá ando, tratando de zafar”, “No, te agradezco, no es para mi, ya lo intenté mil veces pero evidentemente no me da el cuero ”, “No te das cuenta que nadie me quiere, soy un fracasado, ya se me fue el tren ” y frases por el estilo. Tomy vive con una profunda amargura interior que se ha convertido en fuerza autodestructiva. Cuando Tomy se equivoca o algo no sale como él esperaba, enseguida se autoflajela o se automaldice diciendo que es un fracaso, que nada le sale bien, que no vale nada y que nunca nadie lo va a aceptar o querer tal como es. Y termina comprobando que su hipótesis es verdadera: soy inferior a los demás. La ira orientada hacia uno mismo siempre es igual a depresión. Y mientras aflora el ratoncito depresivo y llorón desde arriba todavía se escucha la pregunta: “¿Quién mató a Aslán?”
La respuesta es simple: no está muerto, solo dormido. Y de vos depende despertarlo. Alguien escribió: “Los ganadores, son simplemente ex perdedores que se enojaron. Se cansaron del fracaso. El día en que usted se enoje con sus fracasos es el día en que comienza a ganar”. Si no puedo enojarme con Dios ni con los demás, y tampoco conmigo mismo; entonces, ¿qué hago con el león que ruge en mi interior?, ¿dónde va a parar mi ira?. Integrate al cuarto grupo. Ex perdedores que se enojaron con sus fracasos. Personas que dejaron de echarle la culpa a Dios, a los demás o a sí mismos, y decidieron depertar al león. Aslán mira fijamente a los jóvenes guerreros y simplemente les dice “peleen”. Y los guerreros toman al desafío. Ven oportunidades que otros no ven. Hacen cosas que otros no hacen. Creen y se esfuerzan. Prueban sus fronteras, le dicen sí a la batalla. A veces son un poco ingenuos. No se detienen mucho en los obstáculos a sortear. Tampoco en el temor que de repente los invade. Ni siquiera en sus propias limitaciones. La mirada de Aslán les infunde coraje y están convencidos de que todo es posible. Son jóvenes guerreros. Personas de ira. Ni toros, ni serpientes ni ratones. Leones al igual que su Rey.
El viejo apóstol Juan los dijo: “Les escribo a ustedes, jóvenes, porque son fuertes y han vencido…”. Decidí vivir tus días desatando la “buena ira”. Viví con pasión. Viví como guerrero. Peleá por tu corazón. Peleá por tus sueños. Peleá por otros. Peleá por una causa heroíca, más grande que vos. Aslán está de tu lado.


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¿CREES?

Cuando un barco se detuvo durante un día en una isla remota, el cristiano que en él viajaba decidió emplear la jornada del modo más provechoso. Deambulaba por la playa, cuando se encontró con tres pescadores nativos que estaban reparando sus redes y que, en su elemental español, le explicaron cómo habían sido evangelizados siglos atrás por los misioneros.- Nosotros ser cristianos – le dijeron, señalándose orgullosamente a sí mismos.

El cristiano quedó impresionado.
Al preguntarles si conocían la oración del Señor, le respondieron que jamás la habían oído. El cristiano sintió una profunda conmoción. ¿Cómo podían llamarse cristianos si no sabían algo tan elemental como el Padre nuestro?- Entonces, ¿qué es lo que dicen cuando oran?
- Nosotros levantar los ojos al cielo. Nosotros decir: “Nosotros ser tres, Tú eres tres, ten piedad de nosotros.”
Al cristiano le horrorizó el carácter primitivo y hasta herético de su oración, de manera que empleó el resto del día en enseñarles el Padre nuestro. Los pescadores tardaban en aprender, pero pusieron todo su empeño y, antes de zarpar al día siguiente, el cristiano tuvo la satisfacción de oír de sus labios toda la oración sin una sola falla.

Meses más tarde, el barco del cristiano pasó nuevamente por aquellas islas y, mientras el religioso paseaba por la cubierta rezando sus oraciones vespertinas, recordó con agrado que en aquella isla remota había tres hombres que, gracias a sus pacientes esfuerzos, podían ahora orar como era debido. Mientras pensaba esto, levantó los ojos y divisó un punto de luz hacia el este. La luz se acercaba al barco y, para su asombro, ¡vio tres figuras que caminaban hacia él sobre el agua! El capitán asustado detuvo el barco y todos los marineros se asomaron por la borda a observar aquel asombroso espectáculo.Cuando se hallaban a una distancia desde la que podían hablar, el cristiano reconoció a sus tres amigos, los pescadores nativos. - ¡Amigo cristiano! – exclamaron –, nosotros alegrarnos de verte. Nosotros oír tu barco pasar cerca de la isla y correr a verte.- ¿Qué deseáis? – les preguntó el cristiano con cierto recelo.- Amigo – le dijeron -, nosotros tristes, nosotros olvidar bonita oración. Nosotros decir: “Padre que estar en cielo, santificado sea su nombre, venir Reino…” Después olvidar. Por favor, decirnos otra vez toda la oración.
El cristiano se sintió humillado: - Vuelvan a sus casas, mis buenos amigos – les dijo - , y, cuando oren, digan: “Nosotros ser tres; Tú eres tres, ten piedad de nosotros.”
A los seres humanos nos encantan los dogmas. Pero ningún dogma puede transformar nuestra vida. Existe una diferencia entre dogma y fe. Religión y Espíritu no siempre son sinónimos. La historia de los pescadores lo ilustra muy bien. El relato no hace apología de la ignorancia. Sí alienta una fe genuina y transformadora. Jesús dijo “¡Felices los pobres de espíritu!”. El poder no está en las fórmulas sino en las actitudes. No son nuestras palabras lo que Dios escucha sino nuestro corazón. Podemos conocer mucho acerca de Dios pero sin conocer a Dios. Jesús no vino a enseñar de religión, vino a enseñarnos a vivir. Su enseñanza es poder, no fórmula muerta. Y su pregunta sigue siendo la misma: “¿Crees?”. Quizás tu respuesta sea “Sí… creo que existe un Dios… creo en lo que enseña la Biblia…” Jesús vuelve a preguntar: “¿Crees?”. “Sí… creo que Jesús murió en una cruz y resucitó al tercer día” Nuevamente la pregunta: “¿Crees?”.
Un trapecista se disponía a cruzar el Gran Cañón del Colorado sobre una cuerda floja. Una gran multitud se había dado cita para contemplar su hazaña. Con su vara de equilibrio en mano estaba a punto de comenzar su arriesgada caminata cuando, dirigiendo su mirada hacia la multitud, pregunta: “¿Creen que soy capaz de cruzar al otro lado?”. Todos gritaron entusiasmados: “¡Siiiiiiiiii! ¡Creemos!” Nuevamente el trapecista pregunta: “¿De verdad creen que soy capaz de cruzar?”. La multitud gritó con aún más fuerza: “¡Siiiiiiiiiiii! ¡Claro que creemos!” Finalmente el trapecista pregunta: “Dado que creen, ¿quién se anima a cruzar subido a mis hombros?”. Silencio…
Creer es actuar. No se cree con el intelecto sino con los pies. Hace unos años una publicidad versaba “no nos crea, pruébenos”. El slogan lo tomaron de Jesús. En una oportunidad sus discípulos se hallaban en un barco en medio del mar. Él llegó a ellos caminando sobre el agua. Pedro le preguntó “¿Puedo probar?”. La respuesta fue inmediata “¡Claro que sí Pedro!”. Me imagino a Pedro sentado al borde del barco, arremangando con temor su túnica, cerrando sus ojos, tomando coraje, colocando lentamente un pie, luego el otro, su corazón palpitando fuerte, tratando de afirmar sus rodillas temblorosas… Y allí está… ¡caminando sobre el agua! Un pobre de espíritu. Otro pescador que entendió el misterio de la fe. En realidad no sé si lo entendió. De lo que no tengo la menor duda es que Pedro experimentó el poder de la fe. Y en definitiva eso es lo que importa. Poco para analizar, mucho por obedecer. ¡Mucho por comprobar! Creer es salir del barco. Quizás te preguntes: “¿Cómo puedo tener yo una experiencia con Jesús?” Sencillo: ¡Creyendo!. ¡Sacá los pies del barco! Con tus propias palabras, sin usar fórmulas religiosas pero con sinceridad, decile: ¡Jesús te quiero conocer! No quiero simplemente saber acerca de vos, ¡quiero conocerte a vos! No quiero una religión inútil, quiero una fe viva y transformadora”. Y disponete a cambiar. ¡Tirate a los hombros de Jesús! Creer es rendirse. Creer es obedecer. Y al obedecer no vas a tardar en descubrir que sus enseñanzas tienen poquísimo de dogma… ¡y muchísimo de vida! ¿Crees?

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Venga tu Reino a Buenos Aires

http://www.pastoresba.org.ar/

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Primavera en Costanera Sur - 21 de Septiembre 12hs.

El domingo 21 de septiembre de 12 a 18 hs. se realizará por sexto año consecutivo el Festival “Primavera sin Violencia” con epicentro en el anfiteatro de la Costanera Sur, coordinado por el Grupo Transformar y La Iglesia del Centro, junto a diferentes agrupaciones de la comunidad evangélica y municipios.

Bajo el lema "Primavera del Encuentro" se promoverán actividades de acercamiento entre diferentes tribus urbanas, docentes y alumnos, padres e hijos además de shows en vivo de bandas musicales, actividades deportivas, coreografías, arte callejero y regalos para los jóvenes.

Una de las actividades más destacadas será, desde la plataforma, el momento en que los jóvenes honren a los docentes demostrando que reconocen su labor y así contrastar con hechos los últimos acontecimientos de violencia en las aulas.

"Primavera sin Violencia" comenzó en el año 2003 con el propósito de que miles de jóvenes conozcan que es posible celebrar la llegada de la primavera y el día del estudiante sin excesos, descontrol, ni violencia.

En el 2005 fueron más de 15.000 los jóvenes que se sumaron al lema "La Primavera es Vida, Vivila", la participación aumentó en el 2006 con “Tu Vida Vale” y en el 2007 se vivió en simultaneo una “Primavera de Verdad” en las ciudades de La Plata, Adrogué, Parque El Sembrador (Máximo Paz), Salto (Buenos Aires), Paraná, San Lorenzo (Santa Fé), Salta y Río Grande.

Organizan:
Junto a la dirección de Cultos en Buenos Aires, Grupo Transformar y Jóvenes del Centro, Parajoven (La Plata), Fundación Nuevo Nacimiento (Adrogué), Parque El Sembrador (Máximo Paz) y No Más Violencia (Paraná).
Coordinación General:
Grupo Transformar e Iglesia del Centro

Apoyan:
Consejo de Pastores de la Ciudad de Buenos Aires, FECOPEBA, Consejo de Pastores de La Plata, Municipalidad de La Plata, Fundación El Buen Pastor, Municipalidad de Almirante Brown y Dirección Juventud de Salto (Provincia de Buenos Aires)

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5º sábado en Adrogué > 30 de Agosto 19:30hs

Nos visita desde Cordoba el Pastor Sergio Belart, uno de los pastores juveniles que mas jóvenes impacta en todo latinoamérica. Director gral de los congresos juveniles Cita con la Vida CBA.
En la adoración Sebastián Golluscio, presentando su nueva producción "Maximo Amor".
El lugar es en la Iglesia Cristo para Todos
Pastores: Eduardo Lorenzo, Bernardo Affranchino, Pablo Garay y José Luis Abeleira.
Esteban Adrogue 1327 - Adrogué
Para llegar mas fácil, ir hasta Est. Adrogué desde Constitución y caminar no mas de 10 cuadras.

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Misión Urbana - Bs As. 29 de julio al 2 de agosto

http://www.unoargentina.com.ar/

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Xplosión de Amistad - 12 de Julio 20hs

http://www.youtube.com/watch?v=kTXvFwj75is

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Brigada a Tucumán II

Hola, gente hermosa y amada del Señor!
Se dieron cuenta de que se nos avecina Semana Santa?
Y este año, contamos con un dia feriado contiguo; todo suma!!!
Ya pensaron qué van a hacer en ese tiempo que nos brinda el Señor?
No me digas que sólo pensás egoístamente en vos y solamente vos!!!!
Es tiempo de dejar de mirarnos el ombligo, y proyectar la existencia hacia otros seres!!!!
Aquí va una excelente propuesta: viaje misionero a Rumi Punco (Tucumán). Que tal,eh???

Más detalles:
saldríamos desde EEUU 1273 el dia miércoles 19 en horas de la noche (después de las 20hs, a confirmar); volveríamos el lunes (feriado) al mediodia.
El viaje sería en combi de confort larga distancia, charteada y a disposición de nosotros.
La estadía sería en casas del pueblo (o carpas, para los más aventureros/as).
Las tareas a desarrollar en el lugar: evangelismo; oración por enfermos, trabajo, liberación; discipulado...
Me olvidé de algo? Creo que no; pero ante cualquier duda, escribí, llamá, comunicate de alguna manera y hacé llegar tu inquietud!!!
hasta pronto!
Dios bendiga enormemente tu vida!!!
J+
(mirnalisak1@hotmail.com)

Quienes van? si preguntas esto no es la mejor motivación para ir,
Dios es fiel rodeándote de gente excelente, servicial y q te suma!
En principio jóvenes plus, el grupo de Misiones y jóvenes.
Q hay q llevar? corazón dispuesto y ganas de dar... $350.- jeje,
q es aproximadamente lo q gastemos.
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